El 9 de julio de 2019 nuestro amado sr. Alfredo Arrázola, padre de nuestro Apóstol Miguel Arrázola, partió a la presencia del Señor. El Señor Alfredo se caracterizó por ser un hombre de fe, guerrero y valiente, quien, con un corazón dulce, tierno y sereno, bendijo la vida de miles de personas en nuestra congregación y fuera de ella, mostrando siempre el amor de Cristo en todo lugar.
El sr Alfredo dejó un legado de pasión y amor por el Señor que hoy todos tomamos, porque de él aprendimos que debemos buscar siempre la forma de hacer la voluntad de Dios aquí en la tierra, haciendo discípulos, construyendo un templo para Él, sirviendo a Dios y a la gente, predicando el evangelio y llevando de Su amor y misericordia a todos.
A nuestra amada familia pastoral le reafirmamos que estamos con ustedes, les amamos y oramos para que nuestro buen Dios les reconforte y les dé de Su paz que sobrepasa todo entendimiento.