Comienza a adorarle y exaltarle porque el tiempo del lloro se acabó, éste es el tiempo de la gloria de Dios.
No te desanimes, el enemigo sabe que tu bendición está cerca y por eso ha querido sacarte del camino pero nada va a impedir que seas bendecido. El Señor va a hacer algo.
El Señor es especialista en cambiar el pronóstico, todo lo que el enemigo iba a usar para mal, Dios lo usará para bendecirte. Viene el tiempo en el que ¡Él te va a levantar!