Mateo 6:31-34 (NTV)
31 »Así que no se preocupen por todo eso diciendo: “¿Qué comeremos?, ¿qué beberemos?, ¿qué ropa nos pondremos?”. 32 Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades. 33 Busquen el reino de Dios[e] por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten. 34 »Así que no se preocupen por el mañana, porque el día de mañana traerá sus propias preocupaciones. Los problemas del día de hoy son suficientes por hoy.
Cuando Dios diseño el plan de nuestras vidas, no solo nos dio lo necesario para vivir el día a día, Dios es Dios de más que suficiente, de sobreabundancia. Cuando Dios multiplicó los panes y los peces, sabía cuántas personas estaban en el lugar, pero Él no solo lo hizo para alimentar a los que estaban, sino que dejo doce canastas, es decir, aunque Dios conoce nuestra necesidad, Él es un Dios que hace mas de lo que podemos pedir, imaginar y soñar.
No vayas a orar con una mente limitada, porque Dios irá hasta donde se lo permitas; cuando ores, ve alto, porque no importa que tan alta es tu necesidad, Dios siempre va a superar todas tus expectativas.
El dueño del oro y de la plata, del universo, es tu papá. Dios siempre será Dios, siempre será padre, antes de la fundación del mundo se mostró padre al preparar y diseñar todo para que sus hijos pudieran vivir en la tierra. El primer milagro que Jesús hizo en la tierra fue el de convertir agua en vino, una demostración de papá, ese era el regalo más costoso y lo dio el papá.
Cuando Jesús muere en la cruz, nuevamente Dios se muestra como padre, porque envió a Su único hijo, para que todos los que vinieran después de Él, no se perdieran, sino que tuvieran vida eterna. Dios siempre será nuestro padre.
Nunca mas te sientas solo, abandonado o huérfano, porque aquel que te cuida, nunca descansa, nunca duerme. ¿Por qué vivimos una vida de frustración o estrés?, solo aquellos que no tienen futuro deben preocuparse, pero nosotros, que sabemos que nuestros tiempos están en las manos de Dios, no debemos estar preocupados. Si él te creó y te dio vida, te va a sostener.
Filipenses 4:6-7 (RV60)
6 No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. 7 Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús.
Siempre oramos por paz, pero no habrá paz si no estamos quietos y reposando en la presencia de Dios. La paz viene cuando aprendemos a descansar en Él. La ausencia de paz es el producto del afán, no te afanes, aprende a descansar en Él. Cuando somos impacientes solo demostramos lo tercos que somos al no permitir que Dios pelee por nosotros. No te impacientes si algo no salió hoy, se paciente, aprendamos a confiar en Él. No te afanes por un milagro, porque el mayor milagro es Él. Seamos agradecidos por el hoy, amemos el día de hoy, vivíamos el día de hoy. Muchas veces decimos que debemos soltar el pasado,
porque si no soltamos duele, pero el futuro también debemos soltarlo, debemos vivir en fe y enfocados, no permitas que por querer comer el futuro, estés muy lleno para disfrutar el presente. Cada día trae su propio afán, pero cada día es una oportunidad para ver la mano de Dios.
Nunca le preguntes al que va atrás, siempre aprende del que va adelante. Si quiero aprender a vivir la vida, debo preguntarle al creador de la vida. No te preocupes por nada, Dios diseñó todo para nosotros; no nos desgastemos buscando soluciones, preguntemos a Dios la dirección para saber qué hacer. Si pasáramos más tiempo en la presencia de Dios buscando dirección, cometeríamos menos errores y seríamos mas felices.
Somos sus hijos.
Salmos 121:1-8 (NTV)
Levanto la vista hacia las montañas, ¿viene de allí mi ayuda? 2 ¡Mi ayuda viene del SEÑOR, quien hizo el cielo y la tierra! 3 Él no permitirá que tropieces; el que te cuida no se dormirá. 4 En efecto, el que cuida a Israel nunca duerme ni se adormece. 5 ¡El SEÑOR mismo te cuida! El SEÑOR está a tu lado como tu sombra protectora. 6 El sol no te hará daño durante el día, ni la luna durante la noche. 7 El SEÑOR te libra de todo mal y cuida tu vida. 8 El SEÑOR te protege al entrar y al salir, ahora y para siempre.
El que te cuida siempre esta vigilante, te sostiene con su mano de poder. Las cosas malas vienen cuando no creemos que estamos siendo cuidados por Él, muchas veces estamos mas pendientes de lo malo que puede pasar, en lugar de disfrutar de Su cobertura. Jesús le dijo al paralítico de Bethesda, “levántate, toma tu lecho y anda”, para que cada vez que el paralítico pensara que no podía mas, que sus fuerzas se acababan, supiera que podía tomar su lecho y tirarlo, diciendo que quien lo levantó una vez, lo haría las veces que fuera necesarias. Si hoy estas caído por los problemas, descansa en sus promesas, si Él te levantó
una vez, lo hará otra vez. Todo tiene una solución, no te amargues, no te quejes, Dios te va a levantar y te sacará adelante.
Muchas veces no vemos la mano de Dios, porque las nuestras no lo dejan trabajar. Mientras Dios trabaja, descansa. No importa cuantas batallas tengas que enfrentar, de todas Dios te librará y siempre vas a ganar.
No se preocupen por nada, solo busquen Su reino, y todo lo demás será añadido. El afán y la preocupación los usa satanás para distraerte de cumplir el propósito que Dios tiene para ti; hoy comienza a buscar a aquel que tiene tu respuesta, no solo pensando en ella, sino que tu búsqueda por Él sea de gratitud, de agradecimiento, que sin importar las tormentas, valles y desiertos, tu actitud hacia Él nunca cambie, porque cuando tu trabajas por Él y tienes las manos ocupadas en su obra, Él comienza a trabajar por tu causa. Tu sueño se hará realidad el día que decidas hacer realidad Su sueño.
No importa que tan grande seamos o cuanto éxito logremos, para nuestros papás siempre seremos sus bebés. Nada diferente pasa con nuestro padre celestial (Mateo 7:11), nuestro Dios es padre, esa es su mayor condición. No importa qué tan sucio, fracasado, estresado, frustrado te sientas, no importa si logras mucho o poco, no importa si llegas a la cima o no, nada de eso importa, para nuestro padre celestial, siempre seremos sus hijos. Sin importar tu condición hoy, eres su hijo.
