¿Cuántos vinieron esperando que Dios haga algo a través de Su Palabra
De aquí vas a salir con ese gozo que estaba pagado en tu vida.
Juan 10:10 (RV60)
“El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia”.
Un cristiano triste no tiene presentación, porque al haber recibido a Jesús en su corazón debe haber gozo en su vida, pero el enemigo no quiere vernos alegres y gozosos, siempre está pensando en cómo destruirnos.
A muchos nos han robado o nos han quitado algo que nos pertenece y eso nos pone tristes, impotentes, Satanás a través de esas circunstancia trae frustración a nuestra vida y desesperanza.
Nehemías 8:10 (SNVI)
“Luego Nehemías añadió: «Ya pueden irse. Coman bien, tomen bebidas dulces y compartan su comida con quienes no tengan nada, porque este día ha sido consagrado a nuestro Señor. No estén tristes, pues el gozo del Señor es nuestra fortaleza»”.
El gozo del Señor es tu fortaleza, a medida que te ríes, impedimos que el diablo nos quite el gozo que recibimos con El Señor.
La diferencia entre la felicidad y el gozo es que la felicidad depende de las circunstancias a nuestro alrededor, en cambio el gozo depende de la relación que tengamos con Dios, el gozo es permanente y nuestro gozo no depende de nuestras circunstancias. No nos podemos mover por las emociones y la tristeza y depresión no son la manifestación del gozo que debe haber en nuestra vida.
Asimismo, cuando pecamos el gozo se va y esto se refleja en tu cara y en tu vida misma.
BENEFICIOS DEL GOZO
Salmo 51:8 (RV60)
“Hazme oír gozo y alegría, Y se recrearán los huesos que has abatido”.
Recrear es crear algo nuevo, que tiene vida, porque el gozo de Dios es tu fortaleza.
Por el lado de la ciencia, encontré que las endorfinas son hormonas que genera el organismo, ellas traen felicidad, cuando son bajas, estamos tristes, de igual manera físicamente hay cosas que pueden elevar esos niveles. Pero el gozo que nosotros tenemos es permanente.
Cuando preparaba esta enseñanza se presentaron varias circunstancias que quisieron robarme el gozo, pero yo no lo permití y Dios trajo ésta palabra a mi mente para que la pusiera en práctica también.
Habacuc 3:17-18 (RV60)
“Aunque la higuera no florezca, Ni en las vides haya frutos, Aunque falte el producto del olivo, Y los labrados no den mantenimiento, Y las ovejas sean quitadas de la majada, Y no haya vacas en los corrales;
18 Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación”.
Con TODO, no importando la circunstancia, debemos estar alegres, gozosos y confiando en el Señor. Di “Me voy a levantar cada día con las promesas que Dios me ha dado”.
¡De este lugar vamos a salir llenos de gozo y paz!
¿CÓMO MANTENER EL GOZO?
1. Recuerda tu pasado y alaba al Señor
Salmo 103:2 (RV60)
“Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios”.
Recuerda de donde Dios te sacó. Llegaste destruido y hoy eres próspero y tu familia está restaurada.
Salmos 40:2 (RV60)
“Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso;
Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos”.
Recuerda que Dios cambió tu nombre a Su hijo y ya no eres el que fuiste.
2. Recuerda tu futuro: Nuestro futuro es glorioso, nuestro destino es una calle de oro, mar de cristal.
3. Alábale a pesar de las circunstancias: A veces las circunstancias nos golpean fuerte, las mentiras, la traición o el abandono. Nosotros tenemos que vivir cada día en Fe, debemos disciplinarnos, porque el gozo es una disciplina.
Cuando el diablo te quiera quitar algo, tienes que arrebatárselo, dile “no me puedes quitar el gozo que El Señor me regaló”. Cuando en medio de una circunstancia nos gozamos, Dios manda a Sus ángeles a suplir nuestras necesidades.
No conozco tu situación, tal vez escasez, un matrimonio destruido, una enfermedad, pero quiero decirte que Dios tiene el control de TODO porque Él lo ha prometido repite después de mi : ”Señor mi gozo no depende de mí circunstancia sino de Jehová que creó los cielos y la tierra”.
Cuando te gozas, hay paz. Cuando crees que no hay esperanza, Dios nos trae esa esperanza. El Señor renueva nuestras fuerzas cada día
Gálatas 5:22 (RV60)
“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe”.
Los frutos de el amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe deben verse reflejados en nuestra vida y día a día no importando las circunstancias.
