Por fe es que vivimos, y respiramos, no es porque nuestros órganos estén funcionando, es la fe la que nos hace funcionar, que no nos deja detenernos ni cansarnos, y si nos cansamos nos levantamos.
2 Corintios 4:16-18 (NVI)
16 Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día. 17 Pues los sufrimientos ligeros y efímeros que ahora padecemos producen una gloria eterna que vale muchísimo más que todo sufrimiento. 18 Así que no nos fijamos en lo visible, sino en lo invisible, ya que lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es eterno.
Lo invisible es más real que lo visible, lo que no vemos es más real que lo que vemos, ya que todo lo que vemos fue hecho de lo que no vemos. Lo que pasa es que de los 5 sentidos que nosotros tenemos, el más fuerte, es el sentido de la vista. El ojo es tan
poderoso, pero a la vez la vista nos ha hecho daño, porque basamos las cosas en lo que vemos no en lo que Dios prometió, nos acostumbramos a vivir por vista y no por fe, cuando la orden de Dios es que vivamos por fe.
Lo que vemos aterroriza, asusta, nosotros tenemos que vivir por la fe, y la fe viene por el oír la palabra de Dios, por lo tanto cuando nosotros leamos nuestra Biblia lo debemos hacer audiblemente, oír las promesas de Dios, porque lo que Dios nos promete es más grande de lo que estás viendo, en pocas palabras la fe es lo que no ves pero que ya existe.
Desde que le pides a Dios ser sano, ya lo eres, y si no se ha manifestado, es porque con fe y paciencia se heredan las promesas. La vista a veces nos nubla las bendiciones de Dios para nuestra vida y nos hace entrar en temor. La fe no es muy detallada, es arriesgada, requiere que tu tomes la iniciativa, que te arriesgues.
Hebreos 11:8 (NVI)
8 Por la fe Abraham, cuando fue llamado para ir a un lugar que más tarde recibiría como herencia, obedeció y salió sin saber a dónde iba. Las promesas de Dios son más grandes que las circunstancias, ante un problema financiero, económico debes declarar que si lo vas a lograr, porque al que cree todo le es posible. La fe no mira, la fe oye, porque si uno se pone a mirar se deprime.
No te ates a los dichos de tu boca, la fe llama las cosas que no son como si fuesen, la fe llama a existencia, cuando tu tienes fe, lo que no existe Dios se lo inventa, el abre caminos en medio del desierto, porque para Dios no hay nada imposible, ya que creemos y amamos al Dios de lo imposible.
2 Samuel 5:24 (NVI)
24 Tan pronto como oigas un ruido como de pasos sobre las copas de los árboles, lánzate al ataque, pues eso quiere decir que el Señor va al frente de ti para derrotar al ejército filisteo.
No te distraigas con lo que ves, concéntrate en lo que oyes. Cuando tu estás en fe escuchas mucho ruido, pero tienes que callarlos y alinear tus oídos para solo escuchar la voz de Dios. La instrucción de Dios no viene viendo sino oyendo.
1 Reyes 18:41
41 Entonces Elías le dijo a Acab: —Anda a tu casa, y come y bebe, porque ya se oye el ruido de un torrentoso aguacero.
Elías no dijo que iba a ver unas nubecitas, el dijo que se oía un estruendoso aguacero, Tu lo que tienes que hacer es cerrar tus ojos naturales y empezar a escuchar lo que Dios dice de ti.
